La industria bioenergética australiana requiere marcos políticos bien diseñados, estables y a largo plazo para incentivar y apoyar la inversión en HVO para su inclusión en la hoja de ruta de la bioenergía australiana.

El apoyo político inconsistente en Australia ha afectado a la aceptación del HVO. Sólo Queensland y Nueva Gales del Sur tienen mandatos de mezcla de biocombustibles, con un éxito limitado en el cumplimiento de los objetivos. En respuesta, el Gobierno de Nueva Gales del Sur aprobó la Ley de Enmienda de los Biocombustibles en 2016 que aumenta la accesibilidad de los biocombustibles y tiene como objetivo un mayor cumplimiento de la mezcla de HVO en el Diésel convencional.

La dependencia de Australia de los vehículos pesados y de la logística del transporte por carretera es una oportunidad clave para el HVO en Australia. El gasóleo renovable es un sustituto directo del gasóleo derivado del petróleo, es un sustituto intercambiable, lo que significa que no requiere la adaptación del motor, el sistema de combustible o la red de distribución de combustible.

En Australia la posibilidad de adquirir HVO solo es posible repostando en estaciones de servicio pero la venta está limitada a mezclas con un porcentaje de HVO en el diésel, y no como HVO puro o HVO100