El GLP sigue siendo relativamente impopular en Bélgica, aunque hay signos de cierta recuperación. Esto es realmente extraño, porque el GLP es un combustible relativamente limpio y especialmente atractivo para los conductores frecuentes.

El número de matriculaciones de vehículos que funcionan con gas licuado de petróleo (GLP) sigue siendo bajo en Bélgica. Sin embargo, hay una tendencia al alza.

El precio del GLP sigue siendo inferior al de la gasolina o el gasóleo. En Bélgica, hay muchos lugares donde se puede repostar GLP a precios favorables. La red belga de estaciones de servicio está bien desarrollada. No todas las estaciones de servicio de GLP están atendidas, y en todas ellas se puede pagar con tarjeta de débito o crédito sin necesidad de una tarjeta de fidelidad. Repostar GLP es tan fácil como repostar gasolina o gasóleo.

En Bélgica no hay demasiados vehículos con GLP en la carretera. Sin embargo, hay esperanza en el horizonte. El reciente escándalo del gasóleo hace que el GLP sea una alternativa atractiva para los conductores habituales. Esto lo hace interesante para las empresas de alquiler. Queda por ver si el gobierno decide revisar algunas de las desventajas fiscales. Sin embargo, las numerosas ventajas hablan por sí solas. Como combustible alternativo, el GLP es una opción excelente y muy barata en las gasolineras belgas.

En Belgica hay actualmente 346 estaciones de servicio que ofrecen GLP para la venta al público, extendiendose por cualquier provincia del pais