Los Países y Territorios de las Islas del Pacífico (PICT, por sus siglas en inglés), que forman la gran mayoría de los estados del continente de Oceania, enfrentan desafíos particulares de suministro de energía debido a su geografias insulares pequeñas y remotas, recursos naturales limitados y largas distancias desde los principales mercados. La mayoría de los PICTS dependen en gran medida de los productos derivados del petróleo importados para satisfacer sus necesidades. Esta dependencia significa que se ven muy afectados por el volátil precio del petróleo.. Además, estos países se encuentran entre los más vulnerables en términos de cambio climático y desastres naturales.

Históricamente, ha habido opciones limitadas para desplazar los combustibles de petróleo líquido como queroseno, gasolina y diesel. Sin embargo, la evolución reciente del mercado ha cambiado esta situación. El Gas licuado de petróleo (GLP) ofrece cada vez más soluciones provisionales económicas y de bajas emisiones en la transición de los combustibles líquidos derivados del petróleo hacia las energías renovables.

Todos los PICTS ya usan GLP, principalmente para cocinar en el hogar y encuentra importantes oportunidades de expansión en el sector de la automoción. El argumento para hacer este cambio es por razones de salud, sostenibilidad ambiental y para el ahorro de costos para el conductor. El aumento del volumen podría hacer que algunos PICT pasen a ser grandes consumidores lo que podría tener un impacto significativo en el precio entregado. La incorporación del uso de GLP en el transporte significaría una mejora en el precio del GLP en cualquier otro sector.